La ruta reina de las ocho que te proponemos para conocer en profundidad la provincia de Segovia, con 325 km a lo largo de los cuales, podrás visitar lugares con encanto tanto monumentales como paisajísticos. Sotosalbos, la cueva de los Enebralejos, Sepúlveda, Turégano, Ayllón o el mirador de San Frutos, son algunos de ellos.
Haciendo un símil con el ciclismo, comenzamos la "Ruta Reina" de todas las que hemos diseñado para conocer la preciosa provincia de Segovia. Salimos de Ayllón en dirección noroeste. Hemos pasado de la SG-195 a la SG-945, ambas autonómicas de segundo nivel, con un asfalto y trazado similares.
Esta además, es la ruta más turística de las que hemos diseñado para que conozcas en profundidad la provincia de Segovia, con 7 paradas obligadas en las que es posible que permanezcas más de una hora en varias de ellas, lo que unido a los 324 km que recorreremos, más vale que madrugues un poco. Claro que,otra posibilidad que te recomendamos nosotros, es que recorras varias rutas a lo largo de otros días, y te repartas los puntos de interés tal y como hicimos nosotros, ya que varios se repiten en el trazado de las rutas. Si sigues este consejo, en esta ruta nos centraremos sobre todo en Ayllón y Maderuelo, cercanas entre sí y de gran belleza y atractivo, y Sotosalbos, donde llegaremos tras superar la capital.
El paisaje al abandonar Ayllón es abierto y el trazado bastante recto, aunque de vez en cuando alguna curva rompe la monotonía de las rectas.
Durante el trayecto pasamos por Mazagatos y Languilla y Aldealengua de Santa María. Poco después, un cartel anuncia el Embalse de Linares situado en la parte sur del Parque Natural de las Hoces del Río Riaza, que además coincide con otro de los pueblos imprescindibles de esta ruta: Maderuelo.
Sin duda merece la pena hacer una parada en este encantador pueblo, al que se accede cruzando un puente construido como alternativa al Puente Viejo, inundado por el embalse y que asoma cuando no tiene mucha agua.
Maderuelo tiene prohibida la circulación de vehículos excepto vecinos, así que tendrás que aparcar la moto antes de cruzar la Puerta de la Villa, que da acceso al pueblo.
Una vez dentro, merece la pena sin duda dar una vuelta por el pueblo.Durante el paseo, llegarás a una terraza donde hay una catapulta similar a otra que hay en el castillo de Iscar, en Valladolid. Nos contaron los lugareños que una vez al año ponen la catapulta en marcha para para hacer una exhibición, lanzando sandías hasta la Ermita de la Vera Cruz, situada al principio del puente por el que hemos accedido hasta aquí,en el otro lado del embalse.
Todo es bonito en este pueblo y aunque no es lo principal, hay una curiosidad dentro de su iglesia, algo que no hay en ninguna otra, pero no vamos a desvelarla, debes entrar en ella para verla.
Ya fuera de Maderuelo, continuamos ruta siguiendo el borde de las Hoces del Río Riaza. El trazado es bastante curvo hasta que abandonamos las Hoces, llegando a la provincia de Burgos. Nosotros hemos de continuar recto, pero un cartel turístico anuncia algo muy curioso que no podemos perdernos: El Museo de los Aromas, pero esto será para otra ocasión, quizá cuando recorramos Burgos en profundidad.
Alejándonos un poco de las Hoces del Río Riaza, nos dirigimos por esta carretera burgalesa hasta llegar al punto más al norte de esta ruta, situado muy cerca de la localidad de Aranda de Duero.
Pasado el p.k. 7, llegamos a Fuentelcésped donde haremos un giro al sur, buscando las indicaciones de Montejo de la Vega de Serrezuela.
Continuamos hacia el sur por la autonómica de tercer nivel BU-V-9321, de paisaje abierto típico de esta zona de Burgos, abundante en viñedos.
A tan solo 2 km del inicio del tramo, entramos nuevamente en la provincia de Segovia, bordeando de nuevo las Hoces del Río Riaza. Como es lógico en un paisaje tan verde, comienzan las curvas cruzando a la vez el río Riaza, justo a la entrada de Montejo de la Vega de la Serrezuela, donde finaliza este tramo.
La SG-V-9321, carretera por la que circulamos ahora, es una de esas secundarias, con curvas y asfalto bastante gastado pero sin baches.
Son 12 km de subida con alguna bajada que en todo momento nos mantendrán entre los 800 y 1000 metros de altitud, con un paisaje en el que predominan los árboles de mediana altura y la vista no alcanza más allá de los 300 o 400 metros de distancia. Ideal para viajar tranquilo, sin prisa y disfrutar del viento en la cara.
Tras dejar atrás Villaverde de Montejo y Villalvilla de Montejo, finalizamos el tramo a 500 metros de la A1.
Justo a esa distancia, giraremos a la izquierda dirección a Moral de Hornuez. En la misma señal y apuntando a la misma dirección, un letrero turístico nos anuncia la Ermita de Hornuez.
Continuamos rondando los 1100 metros de altitud mientras nos dirigimos al este, por esta carretera sin nombre, muy estrecha y con el asfalto rugoso. Hay que ir muy despacio, primero por la estrechez de la carretera y después porque de vez en cuando hay baches y grabilla. Sin embargo, es un trazado encantador por el paisaje, la soledad y tranquilidad que se respira aquí.
Poco antes de llegar al final del tramo, donde giraremos a la derecha dirección a Moral de Hornuez y Fuentemizarra, hay un desvío través del cual llegarás a la Ermita de Hornuez y donde también puedes hacer una parada si te gustan este tipo de construcciones o te apetece descansar un rato en el área recreativa que allí se encuentra.
Al cambiar de carretera hemos cambiado radicalmente de asfalto siendo este mucho más nuevo, más ancho y con menos curvas, lo que se traduce en un tramo rápido.
Girando levemente la vista a la izquierda, se aprecia el paisaje montañoso de las Hoces del Río Riaza , que hemos dejado atrás anteriormente y que en realidad hemos rodeado, pues ahora, que ya estamos en el pueblo de Barrio de Abajo, nos encontramos a 4 km de Maderuelo, localidad que hemos visitado 5 tramos atrás.
En Barrio de Abajo, giraremos a la derecha dirección a Campo de San Pedro, en un cruce que se encuentra junto a la iglesia del pueblo.
Continuamos hacia el sur por otra vía autonómica de tercer nivel de paisaje abierto. Al fondo a la derecha, se divisan las Hoces del Río Duratón, que cruzaremos dentro de 45 km, y más al sur, y hacia la izquierda, la Sierra Norte de Guadarrama, que ya no volveremos a pisar en esta ruta.
El paisaje es abierto, no en vano se observan estos dos pulmones medioambientales. La carretera es ancha y bien asfaltada, aunque no te confíes ya que te puede salir algún tractor, sobre todo si circulas por aquí en primavera o verano.A mitad de tramo,cruzamos la localidad de Campo de San Pedro y al final llegamos a Bercimuel, donde haremos un nuevo giro a la derecha para ir hacia el oeste buscando la indicación de Cedillo de la Torre y Carabias.
Salimos de Bercimuel tras haber cogido la SG-V-9161, más ancha de lo habitual para ser una carretera amarilla. Al poco cruzamos la vía del ferrocarril atravesando un pequeño túnel.
En general es un tramo bastante rápido, ya que el ancho de la vía y la ausencia de curvas nos permite ir al límite permitido, sobre todo hasta Cedillo de la Torre. Instintivamente, desde aquí bajaremos un poco la velocidad porque hasta el final del tramo,situado en Carabias,cruzaremos una zona arbolada.
En Carabias cruzaremos la A-1 por un paso elevado y justo al cruzar esta vía principal, giraremos a la derecha en un cruce sin indicaciones. Unos pocos metros después, giraremos a la izquierda para ir dirección a Ciruelos y Navares de las Cuevas. Aquí sí que hay indicación.
Esta ruta es larga y si andas un poco justo de combustible, tienes una gasolinera un poco antes de cruzar la A-1.
Hemos recorrido ya casi 100 km pero nos quedan más de 200 para el final de ruta.Si tienes tiempo todavía puedes hacer algo de turismo y ver varios lugares, edificios y curiosidades, algunas de las cuales se pueden ver en apenas unos minutos, llegando con la moto hasta el mismo lugar, como la ermita Nuestra Señora del Barrio, el Rollo o las ruinas del palacete del Marqués de Revilla, todas ellas en Navares de las Cuevas, localidad que se encuentra a mitad de este tramo y donde habremos accedido por otra carretera solitaria y más bien estrecha, sin separación de carriles.
Después de hacer estas pequeñas paradas con las fotografías correspondientes, continuamos recorriendo la otra mitad del tramo, que finaliza en un cruce donde giraremos a la izquierda tras hacer un STOP.
Pasada la localidad de Castroserracín, iremos dirección a Urueñas y Sepúlveda.
Tras este último giro, volvemos a pasar por Castroserracín y continuamos ruta yendo a partir de ahora siempre hacia el sur.
Hasta llegar a Urueñas, se notan claramente en el asfalto los parches de un color más oscuro, pero están bien hechos y no hay grabilla.
Una vez pasado Urueñas, la carretera se ensancha un pelín y el firme se vuelve mucho más suave.
Pasado el p.k. 6 de esta secundaria de segundo nivel, giraremos a la derecha dirección a Castrillo de Sepúlveda y San Miguel de Bernuy. Otro cartel nos anuncia que estan próximas las Hoces del río Duratón.
Circulamos ahora por el tramo más corto de la ruta, que tardaremos un poco más de un minuto en superar ya que el asfalto está en perfecto estado y las curvas son abiertas.
Pero no te confíes, sobre todo si vas al atardecer. Nosotros nos encontramos con dos corzos que aunque estaban pastando en el campo, bien podríamos haberlos encontrado en la carretera. Incluso pudimos hacerles un par de fotos.
El final de este tramo está situado en Castrillo de Sepúlveda, donde giraremos a la izquierda dirección a Villaseca y Cantalejo.
Con un tercio de ruta recorrido, abordamos este tramo que quizá sea el de mayor interés paisajístico.
Con 100 km a la espalda, quizá no sea esta la mejor ruta para desviarse a ver el mirador de San Frutos y la ermita que se encuentra a unos 300 metros del mirador, pero si no lo haces hoy, deberás venir otro día hasta aquí, porque ambos son dos imprescindibles en tu visita a la encantadora provincia segoviana.
Para llegar hasta aquí, primero has de seguir la ruta hasta Villaseca. El trazado es recto y el asfalto muy bueno. Una vez en Villaseca, debes girar a la derecha siguiendo las indicaciones de la Ermita de San Frutos y seguir una pista muy facilita de 3,5 km en la que hay que ir con precaución,más por el tipo de neumáticos que por la moto y que gozarás si vas con una moto trail. No corras mucho para no levantar polvo molestando a los viandantes o a tus compañeros de ruta...
Al final de la pista deberás aparcar la moto y caminar unos 200 metros para llegar a este espectáculo de mirador. Si además vas con un poco de tiempo, merece la pena acercarse hasta la ermita,pero debes ir andando. Está prohibido acceder con cualquier vehiculo a motor.
Ya de vuelta, volvemos a empalmar la ruta en Villaseca adentrándonos de lleno en las Hoces del Río Duratón, donde iremos descendiendo entre curvas hasta la Cueva de los Siete Altares, otro lugar de interés en plena naturaleza donde hay una gran paz con el agradable sonido del agua del río Duratón.
Unas pocas curvas después, llegamos al final del tramo donde continuaremos recto dirección a Sebúlcor y Cantalejo.
Avanzamos ahora hacia Cantalejo, localidad donde se realiza la invernal motera "La Leyenda continúa" con periodicidad anual, que cada año tiene más adeptos y a donde llegaremos tras rodar 8 km por una carretera estrecha y bien asfaltada.
Durante los primeros 4 km, hasta llegar a Sebúlcor,continuamos rodando por el borde de las Hoces del río Duratón, detalle que se aprecia en el paisaje, verde y poblado de árboles por la derecha y con extensiones de sembrados por la izquierda.
Tras otros 4 km llegamos a Cantalejo, donde comienza el típico paisaje de pinares segovianos. En medio del pueblo, giraremos a la izquierda dirección a Turégano y Segovia.
Dejando atrás la localidad de Cantalejo, avanzamos hacia el sur por la CL-603 ancha, rápida y muy bien asfaltada para llegar a Turégano en aproximadamente 10 minutos.
Al poco de iniciar este tramo llegamos a Cabezuela, localidad que cruzamos por el medio para continuar recto en dirección sur. Poco después, entramos en terreno de pinares, llegando a una rotonda en la que iremos hacia la derecha dirección a Turégano.
En el kilómetro 140 de ruta cruzamos el río Cega, punto además donde abandonamos la zona de pinares llegando a Veganzones.
Tras una recta de 4 km llegamos a Turégano por el lado de su impresionante castillo, última parada obligada en esta ruta.
Nos gustan las carreteras secundarias y si además son estrechas, bien asfaltadas y solitarias, mucho mejor. Así que al salir de Turégano, en vez de continuar por la CL-603, que nos hubiera acercado antes a la capital, hemos preferido tirar por la SG-V-2366. Tardaremos diez minutos más en llegar, pero sin duda cuando el placer es rodar por rodar, esta es mucho mejor alternativa.
El trazado no es muy típico de una carretera cercana a una ciudad grande y éste tiene árboles a ambos lados adornados muchas veces con muros de piedra seca, sobre todo a medida que nos acercamos al final del tramo,habiendo pasado la población de Carrascal del Río.
Ya en el kilómetro 158 de ruta y a solo 24 km de la capital, llegamos a un cruce en forma de cruz donde giraremos a la derecha dirección a Basardilla.
Como el dicho "todos los caminos llevan a Roma", podríamos continuar recto enlazando con la N-110, pero pudiendo rodar por secundarias, cogeremos la SG-V-2362.
Al poco de comenzar este tramo, la carretera se ensancha bastante siendo también un trazado rápido ya que no hay muchas curvas y el asfalto se arregló no hace demasiado tiempo.
Dejando atrás la localidad de Santo Domingo de Pirón , atravesamos el arroyo de Sotosalbos para poco después, llegar a un cruce en forma de T donde giraremos a la izquierda, dirección Torrecaballeros.
Coincidiendo más o menos con la mitad de la ruta y con ganas de llegar a la capital para hacer una parada de descanso, avanzamos por esta autonómica de tercer nivel que no lo parece por su anchura y la calidad de su asfalto.
Tras solo 3 km, llegamos a Torrecaballeros donde empalmaremos con la N-110, que nos acercará hasta la capital.
Con casi 200 km recorridos, nos dirigimos a la capital segoviana por esta carretera nacional.
Tal y como hemos comentado anteriormente y habiendo sobrepasado la mitad de esta larga ruta, esta es una buena ocasión para hacer una parada y se estas cerca de la hora de comer, degustar un cochinillo, típico de esta zona..
Abandonamos la capital segoviana con el estómago y el depósito lleno para comenzar el regreso a Ayllón, punto inicial de esta ruta y donde hay muchas curiosidades que visitar..
Nuestra siguiente parada será en Sotosalbos, donde llegaremos tras recorrer 17 km por este trazado de nacional y visitar la que quizás sea la iglesia románica más bella de la provincia de Segovia, construida en el siglo XII y que destaca por su galería porticada, típica de esta zona, por la decoración y número de capiteles. Para entrar en Sotosalbos hay que desviarse unos metros de la ruta, pero la iglesia se ve en un momento y realmente merece la pena.
5 km después de Sotosalbos, dejaremos de lado la población de La Salceda y apenas 1 km después, pasado el p.k. 167, haremos un STOP a la izquierda de la carretera para girar nuevamente a la izquierda, dirección a Valle de San Pedro, Pedraza, y Sepúlveda. Debajo de este cartel hay otro que anuncia las Hoces del Río Duratón.
Justo a la salida de Sotosalbos nos hemos metido de lleno en la Sierra Norte de Guadarrama y aquí el paisaje ha cambiado, cerrrándose un poco y con mucha vegetación a ambos lados de la carretera. Mucho cuidado con los corzos que por esta sierra son muy habituales.
Haciendo curvas abiertas sobre asfalto en buen estado, llegamos a Valle de San Pedro, donde el paisaje se cierra más todavía y la visibilidad a larga distancia es menor. Poco después, pasamos junto a la Ermita Nuestra Señora de las Vegas, otra joya del románico segoviano en la que merece también la pena parar un momento para poder observar su pórtico.
Tras la breve parada, continuamos ruta hacia el norte pasando por La Velilla, donde cruzamos el río Cega y donde salimos de la Sierra Norte de Guadarrama, razón por la cual el paisaje se abre notablemente y se aprecia más la llanura. En La Velilla, debemos continuar recto, pero podíamos también desviarnos 1 km a la derecha para hacer una parada en Pedraza. Si no has visitado este pueblo antes, es una parada obligada, pero lo podrías visitar con más tranquilidad si recorres "La Ruta del Monje".
En el p.k. 17 llegamos a La Matilla. Aquí, si no llevas GPS has de tener cuidado porque es fácil despistarse. La carretera por la que hemos llegado hace una curva a la izquierda pero nosotros debemos continuar recto, a través de una carretera más estrecha que entra en el pueblo. Unos metros después, giraremos a la derecha para tomar la SG-V-2515 dirección a Valleruela de Sepúlveda y Arcones.
Tras el giro anterior nos dirigimos hacia el sur para enlazar nuevamente con la N-110, rodando por la SG-V-2515, de gran belleza paisajística.
Pasado Valleruela de Sepúlveda comenzamos una ascensión haciendo dos paellas a izquierda y derecha para después continuar por llano. En la parte alta de esta subida se ve una inmensa llanura. Por detrás, la Iglesia de Valleruela en primer plano y a la izquierda, la silueta de la Sierra de Guadarrama.
A medida que avanzamos por este asfalto sin señales ni p.k., nos metemos de nuevo en una zona poblada de árboles de pequeña estatura mientras llegamos a Huerta. Aquí el asfalto se vuelve mucho mejor a la vez que mantinene su estrechez.
Poco después, llegamos a Arcones para enlazar nuevamente con la N-110 dirección a Prádena y Soria.
Continuamos los próximos 6,4 km por la N-110, carretera rápida aunque debes extremar las precauciones, pues en esta carretera es habitual que haya corzos en las inmediaciones y a la velocidad de una nacional como ésta, debemos ser muy cautos.
Poco antes de finalizar el tramo llegarás a Prádena. En su término municipal y a solo 1.5 km se encuentra la Cueva de los Enebralejos, otro lugar que no puedes perderte. La cueva es una verdadera catedral natural bajo tierra con impresionantes estalactitas, estalagmitas y otras preciosas formas calcáreas. Además de contar con una enorme belleza natural, la cueva también escondía pinturas rupestres y herramientas, ya que fue una necrópolis en la Edad de Bronce. Es una gran oportunidad para verla, pero como hemos dicho al principio, la puedes visitar en la Ruta de La Pedigüeña y centrarte en otros lugares interesantes en esta ruta, que son muchos.
Poco después de Prádena, concretamente pasado el p.k. 145, haremos un STOP en mitad de la carretera para girar a la izquierda dirección a Perorrubio y Sepúlveda.
El tramo que viene ahora es de los que nos gustan en MotoRutas: carretera estrecha, poco transitada, sin quitamiedos y bien asfaltada, aunque con asfalto ya viejo y con gran variedad de paisaje...
Durante los primeros 5 km, continuamos por la Sierra Norte de Guadarrama, cosa que se nota en el paisaje cerrado, poblado de árboles a ambos lados y curvas abiertas. El asfalto está parcheado, pero lo han hecho bien porque no irás dando botes.
Poco antes de llegar a Casas Altas, un árbol llama la atención. Puedes meterte dentro del tronco y hacerte una foto curiosa. En este punto salimos de la Sierra Norte de Guadarrama y el paisaje cambia radicalmente, abriéndose por completo y cambiando a extensiones de sembrado a ambos lados de la serpenteante carretera.
En el km 72 de ruta, llegamos a Perorrubio, donde una iglesia nos llama la atención con su pórtico. Es románica y no podemos resistir la tentacion de hacer una breve parada. Se trata de la Iglesia de San Pedro ad Vincula, un templo románico del siglo XIII. Paramos para admirar su galería porticada y continuamos la ruta hasta que,pasado Vellosillo, llegamos al final del tramo en un cruce donde la ruta continúa por la derecha hacia Duratón y Duruelo.
Sepúlveda está tan solo a 2.5 km en la otra dirección y lo tenemos pendiente,así que nos desviamos a visitar esta interesante localidad con historia. Al igual que con la Cueva de los Enebralejos, puedes dejar Sepúlveda para visitarla en otra ruta. Dos más de las que hemos preparado para conocer Segovia pasan por esta bonita localidad.
Con la silueta de la Sierra Norte de Guadarrama al fondo, avanzamos por esta carretera amarilla de asfalto impecable. Excepto un par de curvas cerradas, el resto de trazado hasta llegar a Duratón, es completamente recto. Aquí giraremos a la izquierda dirección a El Olmo.
En dirección noreste nos dirigimos ahora hacia El Olmo, por un trazado de muy poca curva.
Al final de la población de El Olmo, nos incorporamos a la SG-232 en línea recta.
Acabamos de incorporarnos a la SG-232 y sobre todo se nota en el asfalto, mucho mejor que la carretera anterior y sobre todo mucho más ancho.
Unos metros antes de acceder a Boceguillas tras haber recorrido una larga recta que compone la totalidad de este tramo, cruzamos la A-1 por debajo, y poco después giramos a la izquierda dirección Grajera. Sobre este cartel hay otro que nos indica hacia Burgos en la misma dirección pero por la A-1. Nosotros continuaremos por la comarcal hacia Grajera.
No tardamos en perder de vista la A-1 tras circular en paralelo a ella durante unos metros.
Giramos una curva abierta a derecha y otro cartel nos recuerda que vamos dirección a Grajera, Campo de San Pedro y Maderuelo. A esta última localidad llegaremos tras dar un gran rodeo que nos permitirá además conocer los pueblos negros y los pueblos rojos.
De momento continuamos por la SG-V-9112 durante 5 rectos kilómetros que nos llevarán hasta Grajera. Sin entrar en esta localidad, hemos de girar a la derecha en un cruce en forma de cruz, dirección a Sequera del Fresno.
Rodando por la SG-V-9111 vamos a por el primer tercio de ruta, por esta bonita y estrecha autonómica de tercer nivel con un asfalto en buen estado pero con algo que lo hace especial. Y es que al principio, parte del carril de ida tiene un asfalto diferente al de vuelta.
Cuando llevamos 2,5 km de tramo, cruzamos un corto túnel para atravesar la vía del ferrocarril y después continuamos por este raro asfalto hasta llegar a Sequera del Fresno. Como en la mayoría de los pueblos, lo que primero se ve es su iglesia, que a menudo suele ser el edificio más alto. Al bordearla siguiendo el trazado de la carretera, vemos que tiene un ábside románico, lo que nos obliga a detenernos al menos para hacerle una foto. El Románico es el estilo arquitectónico que más nos gusta en MotoRutas, y Segovia tiene varias joyas que ver.
Continuamos la ruta por un paisaje verde con árboles de pequeña altura mientras un cartel anuncia la urbanización Prado Pinilla, pero nosotros continuaremos recto en dirección a Fresno de Cantespino, donde llegamos pasado el p.k. 13.
Cruzamos Fresno de Cantespino por la Calle Real y siempre dirigiéndonos hacia Riaza.
En este último pueblo y siguiendo las indicaciones de Riaza, nos hemos incorporado a la SG-V-9115, también autonómica de tercer nivel.
Con la Sierra Norte de Guadarrama cerca, hay una bonita vista desde aquí.
Dejamos atrás Pajares de Fresno y en apenas 2 minutos llegamos nuevamente a la N-110, donde giraremos a la derecha dirección a Riaza y Segovia.
Nuestra siguiente parada es Riaza, donde llegaremos en apenas 5 km de nacional ancha y en buen estado.
Que no te tiente apretar el acelerador, que esta es una carretera muy poblada de corzos y no queremos darnos un susto.
Llevamos 290 km de ruta y ya casi al final merece la pena hacer una breve parada para visitar la bonita Plaza Mayor de Riaza con su ayuntamiento.
Rodamos ahora por un tramo de increíble belleza por varias razones. En primer lugar, su trazado con muchas curvas, que si le sumamos buen asfalto y el hecho de ser una autonómica de tercer nivel, le da más interés todavía. En segundo lugar, por su paisaje, muy verde, con mucha vegetación, que a medida que avanzamos se va abriendo poco a poco. Y en tercer lugar, porque pasaremos por Villacorta y Madriguera, dos de los denominados "Pueblos Rojos" a los que debes entrar a dar un paseo. Si no tienes mucho tiempo, date una vuelta con la moto porque realmente merece la pena el encanto especial de ambos debido al uso de la arcilla y la piedra rojiza de la zona y a que las restauraciones se han realizado manteniendo el cromatismo típico del lugar.
Fuera de la ruta, te recomendamos también visitar El Muyo, accesible desde Madriguera y situado a solo 3 km. El Muyo, es el más característico de los "Pueblos Negros", llamados así por su característico color, fruto del uso de la pizarra como material principal en sus construcciones. La vuelta de El Muyo debes hacerla por los mismos 3 km ya que la carretera acaba allí, y sin duda merece la pena la visita.
Tras la parada en los pueblos Rojos y Negros, continuamos ruta hasta llegar a Santibáñez de Ayllón, no sin antes pasar por El Negredo.
A Santibáñez de Ayllón accederemos a través de un estrecho descenso para incorporarnos en un giro a la izquierda a la SG-945, dirección a Ayllón, situado a 13 km.
Dejando atrás el encanto de los Pueblos Rojos y Negros, ponemos rumbo a Ayllón, uno de los pueblos más bonitos de Segovia y probablemente de España y final de esta ruta. Tiene varios monumentos y lugares turísticos que visitar. Nuestro consejo, aparte de visitar el pueblo (tienes la documentación turística para descargar en esta ruta) es subir a la Torre de "La Martina", una torre de origen árabe que se ha convertido quizá en la imagen más emblemática del pueblo Desde ella puede contemplarse una bellísima panorámica tanto del pueblo y sus campos circundantes, como de la cercana Sierra de Ayllón y puedes subir prácticamente hasta arriba con la moto.
A Ayllón llegarás en apenas 10 minutos, por una carretera muy bien asfaltada de nomenclatura verde y un trazado de curvas abiertas.
Una vez aquí, una buena cena y un paseo por las calles medievales de este bonito pueblo. Con esto, rematamos esta gran día.