Ruta de gran variedad paisajística que discurre por la Sierra de Ävila y Valle de Amblés y en la que tocamos un poco de la Comarca de la Moraña.
Con varios imprescindibles como el Castillo de Aunqueospee, El Pio 5 o el Castillo de Narros de Sandueña entre otros, esta ruta no te dejará indiferente.
Con el depósito de la moto a tope, iniciamos la segunda de las rutas que nos llevarán a conocer los parajes del Valle de Amblés y Sierra de Ávila.
Esta vez, al igual que en la anterior ruta, salimos de la original capital amurallada, donde no puedes ir sin disfrutar de sus curiosidades turísticas y la buena gastronomía. Si no lo has hecho todavía, puedes hacerlo al final de esta ruta ya que como todas las que hemos preparado para conocer la maravillosa provincia de Ávila, esta también es circular.
Así que una vez cruzado el río Adaja, nos dirigimos al Mirador de los Cuatro Postes, donde probáblemente veas algún autobús de turistas que han parado para admirar la hermosa Ávila amurallada desde este punto estratégico. Ya de paso, y como no podemos ser menos, hacemos nosotros también la parada.
Tras la foto de rigor, arrancamos y continuamos por la N-501 que no hemos tenido en cuenta ya que seguimos viendo la capital abulense hasta llegara una rotonda donde tomaremos la segunda salida dirección a Martiherrero, Muñico y Cabezas del Villar.
Ya en la AV-110, lo primero que hacemos es cruzar la A-51 por un paso elevado para poco después cruzar la localidad de Martiherrero.
Poco después llegamos al final del tramo donde cogeremos un desvío a la derecha dirección a Bularros y Marlín.
Rodamos ahora por la primera autonómica de tercer nivel de esta ruta, de nuestras preferidas por sus caractarísticas, sobre todo de estrechez.
Hasta llegar a Marlin, el asfalto es muy bueno, con curvas abiertas y adornado con esos grandes pedruscos que se pueden observar en las cercanías de la capital, pero tras pasar esta localidad se produce un cambio tanto a nivel de asfalto como paisajístico, donde la vista se acorta y se vuelve más tipo dehesa, con árboles a ambos lados de la caretera, a la vez que el asfalto se estrecha y se vuelve más botón.
Entre bote y bote, pasamos por Bularros, donde el paisaje vuelve a abrirse, Villaflor y Morañuela y en el km 27 de ruta llegamos a San Pedro del Arroyo donde giraremos a la derecha para comenzar a rodar por otra carretera más rápida.
Si tienes tiempo, te recomendamos visitar la Villa Romana El Vergel. No tardarás mucho en verla y ya que estas aquí, merece la pena una parada.
Habiendo dejado atrás la localidad de San Pedro del Arrroyo, avanzamos ahora durante 9 rápidos kilómetros de nacional muy recta donde pasado el PK 14 haremos una oreja para dirigirnos hacia Monsalupe.
De vuelta a las carreteras amarillas, avanzamos por la AV-P-102, bastante recta y de paisaje abierto, cuando al poco de comenzar, cruzamos la vía del ferrocarril por un paso elevado.
Poco después cruzamos la pequeña localidad de Monsalupe y más adelante y en dirección norte, cruzamos bajo un puente la A-50, una de las principales vias de entrada a la capital abulense.
A partir de aquí, no tardamos mucho en llegar al final del tramo situado en la localidad de Las Berlanas, donde continuaremos en linea recta aunque habremos cambiado de carretera sin darnos cuenta.
Con casi un quinto de ruta recorrido circulamos ahora en dirección norte por la verde AV-804 en la que apenas tardaremos un par de minutos en llegar a Gotarrendura en un trazado recto y bien asfaltado.
Una vez en Gotarrendura, localidad a la que accederemos por su lado este, continuaremos recto dirección a Hernasancho y Arévalo.
Si tienes tiempo, te recomendamos visitar el Museo López Berrón de Arte y Etnografía, una vieja casa situada frente al ayuntamiento de Gotarrendura en la que se puede rememorar los modos de vida del pasado que tiene por objeto recuperar la memoria histórica de Gotarrendura, sus costumbres, utensilios, herramientas, gastronomía y conocer así, como vivían sus antepasados.
Tras la visita al museo, arrancamos nuevamente la moto y continuamos ruta llegando a Hernansancho, donde giraremos hacia el oeste en una rotonda justo a la entrada del pueblo, junto a una gasolinera, dirección a Salamanca y San Pedro del Arroyo.
Volviendo a circular por una vía más principal, como es esta naranja CL-507, pasamos la localidad de El Oso en un trazado complétamente recto y pasado el PK 23, tomamos un desvío a la derecha dirección a San Juán de la Encinilla.
A punto de salir del Valle de Amblés y la Sierra de Ávila tras dejar atrás San Juán de la Encinilla, llegamos a Papatrigo por la amarilla AV-P-110.
Entramos en Papatrigo por la calle Benito Gutierrez y con precaución giramos a la izquierda. Después avanzamos unos metros y tras un STOP giramos nuevamente a la izquierda. No esta señalizado pero si sigues el track de la ruta no tendrás problema.
Acabamos de entrar en la Comarca de La Moraña, lo cual se aprecia entre otras cosas, por el paisaje abierto con campos sembrados que se aprecia por esta zona principalmente agrícola.
Continuando por la Comarca de La Moraña, en la que no permaneceremos mucho rato, ya que hemos preparado dos rutas para conocerla en profundidad, cruzamos el río Arevalillo nada más salir de Papatrigo.
No hemos avanzado mucho cuando a lo lejos se aprecia la silueta del Castillo de Narros de Sandueña, que no nos podemos resistir a visitar. Fué construido como vivienda por Rodrigo de ValderraÌvano, casado con doña Beatriz de GuzmaÌn e hijo de FernaÌn GonzaÌlez de ValderraÌvano fundador de este mayorazgo. Esta cerrado pero bien merece una parada de 10 minutos para vistiarlo y rodearlo a pié.
Una vez visitado el castillo, buscamos la iglesia con su adosado cementerio y continuamos ruta por la AV-P-117.
A la conquista del punto más al norte de esta ruta, avanzamos por la amarilla y recta AV-P-117 que nos lleva hasta un cruce en forma de cruz situado en el km 72 de ruta. Aquí tras un STOP giraremos a la izquierda. No hay señalización en este sentido aunque sí en el contrario, que nos llevaría hasta Arévalo, punto inicial y final de una de las dos rutas que hemos diseñado para conocer en moto la Comarca de La Moraña.
Con ganas de salir de las rectas de La Moraña, continuamos en direccion oeste hacia Crespos, donde llegaremos tras un par de minutos a velocidad tranquila, localidad que abandonaremos en dirección sur por el lado de la Residencia Mairim.
Habiendo completado casi 80 km de ruta, circlamos ahora en direccion sur llegando a Chaherrero, también situado en Comarca de La Moraña. Una rotonda nos permitirá incorporarnos a la N-501 dirección a San Pedro del Arroyo y Ávila.
La capital se encuentra a solo 32 km de donde nos encontramos, aunque con el rodeo que hemos dado, llevamos ya más de 80 km recorridos.
Circulamos ahora por la N-501, que nos permite ir más rápido de lo habitual en este tipo de rutas en las que predominan las carreteras secundarias.
Aunque solo sea por 5 km, podemos apretar el acelerador rozando el límite permitdo para llegara en unos pocos minutos al desvío a la derecha que nos llevará hasta Muñogrande.
Se ve la localidad de Muñogrande desde el desvío y recorrido ya más de un tercio de ruta, y a punto de abandonar la Comarca de La moraña, rodamos ahora por AV-P-624, también autonómica de tercer nivel,
Tras dejar atrás la localidad de Muñogrande, cruzmos la A-50 por un paso elevado y continuamos en línea recta hasta Castilblanco donde haremos un quiebro hacia el norte para finalizar el tramo en un cruce en forma de T donde giraremos a la izquierda dirección a El Parral y Vita.
Habiendo recorrido casi la mitad de la ruta, salimos por fin de la Comarca de La Moraña para comenzar a rodar por la Sierra de Ávila, por donde discurre en gran parte esta ruta,
En este corto tramo nos dirigimos ahora hacia el sur por un asfalto en muy buen estado y sin linea serparadora de carriles.
Tras 2,5 km con una sola curva muy abierta a la derecha, llegamos al cruce que marca el final del tramo, con forma de Y donde giraremos a la izquierda dirección a El Parral.
Continuando por carreteras amarillas y rápidas, circulamos ahora por la AV-P-620 donde pasamos al principio por El Parral. Este tramo de 7 km es bastante botón así que sujeta con firmeza el manillar de tu moto y disfruta del paisaje un poco más cerrado que el anterior, al menos hasta la mitad del tramo, con árboles de mediana altura y curvas bastante abiertas.
Después, el paisaje se vuelve a abrir dando paso a la inmensidad, cuando llegamos a un cruce en forma de T donde giraremos a la derecha dirección a Muñico.
Con casi la mitad de la ruta recorrida, seguimos ruta en dirección sur oeste por la verde AV-114. Se nota en el paisaje que estamos rodando por la Siera de Ávila, donde las grandes extensions de cereal con paisaje muy abierto se sustituyen por campos de menor extensión y la presencia de árboles de mediana altura nos acompañan sobre todo al borde de la carretera.
El asfalto de este tramo es bueno y la monotonía de su recto trazado se rompe a veces con leves subidas y bajadas.
Pasado el PK 17, giraremos a la derecha dirección a Muñico para incorporarnos al siguiente tramo en un ceda el paso.
Continuando con los tramos cortos, de menos de 10 km, avanzamos ahora por la verde AV-110 en dirección oeste, por lo que nos vamos alejando poco a poco de la capital.
Al poco de comenzar el tramo, pasamos junto a una gasolinera, donde puedes aprovechar para repostar si no has hecho los deberes de salir con el depósito lleno. Poco después cruzamos el río Almar que nos da la entrada a la localidad de Muñico y donde reducimos a la velocidad de travesía. 1 km más adelante, 4 curvas en zig zag, dan paso a una recta de casi 6 km en cuyo final llegamos a las afueras de Gallegos de Sobrinos. Allí haremos una oreja para girar a la izquierda dirección a Blascojimeno, Viñegra, Hurtumpascual y Gamonal.
Ávila es una de esas provincias españolas en la que hay gran variedad de contraste de una zona a otra. En esta provincia hay 5 comarcas, todas ellas con paisaje bien diferenciado. Como quien dice acabamos de salir de La Moraña, agrícola, de paisaje muy abierto y ahora rodamos por la Sierra de Ávila y el Valle de Amblés, de paisaje también bastante abierto pero más ganadera, donde los ecológicos muros de piedra seca se hacen presentes y otras veces los cercados de postes y alambre delimitan los terremos donde el ganado pasta a sus anchas. Estos contrastes hacen que la ruta sea sin duda más interesante a la vista y al olfato.
Si todo esto lo combinamos con carreteras estrechas, como las que hemos buscado para conocer todas estas comarcas, como la AV-P-632, por donde circulamos ahora, la diversión esta asegurada.
11 km después de comenzar este tramo, y tras haber dejado atrás las localidades de Blascojimeno, Viñergra de la Sierra, Gamonal de la Sierra y Manjabálago, donde empezamos a encontrar curvas más cerradas, llegamos a Ortigosa de Rioalmar, en cuya parte norte giraremos a la derecha dirección a Muñana.
Comenzamos ahora un bonito tramo de 16 km de curvas siguiendo a grandes rasgos el trazado del río Almar, al que acompañamos hasta su nacimiento situado entre las localidades de San Juan del Olmo y Muñana
Durante el trazado de este tramo, ascendemos al Puerto de Las fuentes, situado a 1499 metros de altitud para continuar con un descenso también curveado que nos llevará hasta la localidad de Muñana. Pasada esta, haremos un ceda elpaso a la derecha dirección a Piedrahíta y Plasencia.
Nos esperan ahora 20 km de carretera Nacional, que nos adentrarán en la Sierra de la Panamera y Serrota a lo largo de una recta de 6 km durante la cual pasaremos junto a una gasolinera dejando la la derecha las poblaciones de Pascual Muñoz, Amavida, Poveda y Villatoro.
Pasada esta última localidad, comenzamos el ascenso al puerto de Villatoro, situado a 1386 metros de Altutud y en cuya parte derecha comienza el Valle de Amblés para comenzar depués el descenso que nos llevará la final del tramo, pasado el PK 204. Aquí giraremos a la izquierda dirección a Villafranca de la Sierra.
Si dispones de un poco de tiempo, sin duda te recomendamos que continues un poco más adelante por esta carretera Nacional y estes atento a los letreros que anuncian la localidad de Bonilla de la Sierra. Este es uno de esos Pueblos Bonitos de España y aunque ya lo visitaremos en otra de las rutas que hemos diseñado para conocer la encantadora provincia de Ávila, no nos cansamos de visitarlo en todas las ocasiones que tenemos. Entre otras cosas, allí hay un singular pozo que te sorprenderá.
Sin adentrarnos todavía en la Sierra de La Panamera, la vamos bordeando en dirección sur por su cara oeste. Una vez lleguemos al final de este tramo, ya no circularemos más en dirección sur y poco a poco vamos completando el círculo de esta ruta circular, valga la redundancia.
De los 18 km que componen este tramo, los primeros 14 los haremos en constante ascenso al puerto de Chia, salvando un desnivel de 550 metros de altitud, lo que hace que la vista sea espectacular. Una vez en el alto, hacemos la parada obligada en el mirador donde por supuesto puedes aparcar la moto sin peligro para admirar las vistas de la Sierra.
El descenso, de 4 km de longitud que nos lleva hasta San Martín de la Vega del Alberche es tan divertido como el ascenso donde poco antes de llegar cruzaremos el río Alberche.
Al final de esta población, giraremos a la izquierda para dirigirnos dirección a Cepeda la Mora.
Con 184 km de rutra recorridos, empezamos este tramo en San Martín de la Vega del Alberche. Desde aquí, nos dirigimos hacia el este por la carretera amarilla AV-P-510, preparándonos para recorrer 12 km rodeados de un paisaje impresionante.
Poco después de iniciar nuestro trayecto, cruzamos el río Alberche. Nos detenemos un momento para observar el curioso trazado del río en esta zona. Sorprende ver un río tan estrecho y serpenteante, que más bien parece un arroyo. El agua, habiendo recorrido solo unos pocos km desde su nacimiento, permite que el ganado beba con sus patas sumergidas en ambos lados del río, con una profundidad de apenas dos palmos.
Continuamos nuestro viaje y pronto notamos los muros de piedra seca que delimitan los cercados donde el ganado campa libremente. La carretera es bastante ancha, aunque carece de línea separadora de carriles, lo que nos da una sensación de libertad mientras avanzamos.
A lo largo de este tramo, de 12 km en total, rodeamos la Sierra de Panamera y Serrota por su parte sur. En este sentido, tenemos el paisaje montañoso a nuestra izquierda, una vista imponente que nos acompaña en gran parte del camino. A 15 km en línea recta, a nuestra derecha, la Sierra de Gredos también nos deleita con su presencia, añadiendo más belleza a nuestro recorrido.
Después de disfrutar de estos 12 km por la AV-P-510, finalmente llegamos al punto donde cambiamos de tramo para continuar hacia nuestro destino. Dejamos atrás Cepeda de la Mora, listos para dirigirnos hacia el siguiente tramo de nuestra Ruta por la Siera de Ávila situado tras un STOP donde giraremos a la izquierda dirección a Ávila, que se encuentra a tan solo 31 km aunque nosotros haremos un pequeño rodeo, que para algo viajamos en moto.
En el cruce que acabamos de tomar, nos hemos incorporado a la N-502, una carretera más amplia y rápida que la anterior, autonómica amarilla.
En este tramo, cruzaremos la Sierra de la Panamera de sur a norte. Realizaremos este recorrido nuevamente en otra de nuestras rutas diseñadas para explorar a fondo la provincia de Ávila, pero en sentido inverso. Es bien sabido que recorrer una carretera en ambos sentidos ofrece perspectivas completamente diferentes, no solo por la ruta en sí, sino especialmente por el paisaje.
Justo después del PK 38, comenzamos el ascenso al puerto de Menga, un recorrido de 3 km hasta alcanzar la cima a 1564 metros de altitud. Desde la cumbre, al mirar hacia atrás, se puede apreciar claramente la majestuosa montaña nevada de la Sierra de Gredos en el horizonte.
Luego, descendemos por la Sierra de Panamera de sur a norte durante casi 9 km, pasando por el pueblo de Mengamuñoz. Continuamos por la N-502, una vía rápida que nos lleva a través de encantadoras localidades como La Hija de Dios, con su peculiar nombre, y Robledillo.
En Robledillo, podemos hacer un desvío para visitar Baterna, situada a solo 1.5 km. Aquí, en la Ribera del Río Ajada, se encuentra el PIO 5, un lugar imperdible para los amantes de la fauna. En los periodos de migración, podríamos avistar alguna cigüeña negra, una de nuestras aves más emblemáticas y esquivas.
Siguiendo por la cara norte de la Sierra de Panamera y Serrota, llegamos a Solosancho, donde tenemos otra oportunidad de acceder al PIO 5. Aquí, giramos a la derecha para entrar en esta localidad, donde un cartel turístico nos anuncia la proximidad del Castro de Ulaca, uno de los castros mejor conservados que atestigua la vida de los vetones, una comunidad que habitó la península ibérica antes de Cristo.
Unos metros más adelante, giramos a la izquierda para dirigirnos a Riatas y Sotalbo. Junto al cartel de dirección, otro cartel turístico señala el Museo de Riatas, un museo etnográfico que alberga miles de objetos, como aperos de labranza, envases de gaseosa de diferentes marcas, muñecas, ropa, mobiliario, tocadiscos, y elementos especialmente curiosos como un calorífero lleno de arena y piedrecitas pequeñas, y una aventadora, entre muchos otros.
Volviendo a los tramos más cortos, nos dirigimos ahora hacia el este por la AV-P-409, una carretera recta y perfectamente asfaltada.
El paisaje en la falda de la Sierra de la Panamera es muy abierto, y a nuestra derecha se pueden ver las montañas nevadas mientras nos acercamos a Sotalbo. A 1 km de distancia, un castillo visible capta nuestra atención.
Al preguntar a los lugareños, nos informan que se trata del Castillo de Aunqueospese. Nos cuentan que se puede llegar a pie desde aquí, pero que es mucho mejor acceder por una pista desde Mironcillo. De hecho, el castillo pertenece a esa localidad.
Dicho y hecho, nos dirigimos hacia allá.
Así que tomamos la estrecha y bien asfaltada AV-P-408 y llegamos a Mironcillo tras un par de minutos de viaje.
Antes de continuar, vamos a visitar el Castillo de nombre tan singular. Siguiendo las indicaciones turísticas, tomamos una pista de tierra y rodamos por ella durante 3 km. No presenta ninguna dificultad y es común que turistas en todo tipo de vehículos se acerquen hasta aquí. Al llegar, aparcamos la moto y caminamos 300 metros adicionales para llegar al castillo. Es privado y solo podemos visitarlo por fuera, pero definitivamente vale la pena.
Después de esta interesante visita, regresamos por la pista de graba para continuar nuestra ruta desde Mironcillo.
Desde Mironcillo, partimos hacia el este y, en solo 3 minutos, llegamos a Riofrío. Un par de curvas cerradas nos alejan de esta localidad mientras el paisaje, típico de altitudes superiores a los 1000 metros, se muestra bastante abierto, con pocos árboles y mucha montaña.
Seguimos circulando por el lado norte de la Sierra de la Panamera, en dirección este, hasta llegar a un STOP donde giramos 90º a la izquierda en dirección a Ávila.
Aunque circulamos por una carretera con mojones verdes, se nota por el ancho de la vía la cercanía de la capital abulense. Esta es una de las principales vías de acceso a la encantadora ciudad amurallada de Ávila.
Aunque siguiendo por esta carretera llegaríamos a la capital en poco más de 5 minutos, nosotros vamos a hacer un quiebro más, por lo que tras circular solo 2 km por esta AV-900 y pasado el PK 8 giraremos a la izquierda diercciòn a Aldea del Rey Niño.
A solo 15 km de la capital abulense y habiendo hecho un quierbro para alargar un poquito más la ruta yendo por carreteras secundarias, avanzamos ahora por la amarilla AV-P-404 que nos lleva a Gemuño pasando antes por Aldea del Rey Niño, que como la cruzaremos por el medio, lo haremos a velocidad de travesía.
Una ez en Gemuño, al llegar a una fuente giraremos a la derecha para continuar ruta. Atento/a a la fuente porque no hay indicadores de dirección, aunque la verdad es que la única forma de salir de esta localidad por asfalto, es la alternativa que te debemos tomar.
Avanzamos ahora por otro de los tramos cortos por un trazado prácticamente recto que nos llevarás tras 5 km prácticamente rectos a una rotonda en la que tomaremos la primera salida direccion a Ávila.
Prácticamente ya en el final de la ruta, abordamos este penúltimo tramo de 3 km que nos lleva hasta un STOP donde giraremos a la izquierda dirección a Ávila.
Durante estos 5 km una hilera de árboles a unos cientos de metros por la izquierda delata un río: el Adaja. En otro trozo atravesamos otra zona arbolada regada por el arroyo de Gemiguel. Y es que ya se sabe que donde hay agua, hay árboles.
Ya en el km 246 de ruta, abordamos el último tramo que nos llevará hasta la capital. Los árboles a unos cientos de metros siguen delatando la presencia del río Adaja mientras pasamos unas cuantas rotondas en las que continuaremos siempre en linea recta.
Tras solo 3 km de tramo llegamos a nuestro destino final del día entrando en la capital por su lado sur. Siguiento esa carrretera, llegamos su impresionante muralla, una estructura defensiva medieval que rodea el casco antiguo de la ciudad. Construida en el siglo XI, es una de las murallas mejor conservadas de Europa con más de 2.500 metros de longitud que cuenta con 88 torreones semicirculares y 9 puertas, destacando la Puerta del Alcázar y la Puerta de San Vicente.
Y esto es solo el principio de lio que puedes ver y disfrutar en esta capital castellana.