e encuentra a unos 70 km de Segovia capital. A pesar de sus pequeñas dimensiones esta localidad alberga un importante patrimonio monumental, tanto arquitectónico, como natural.
Está situado en una hondonada entre dos peñas, donde abundan los pastizales mantenidos por un arroyo cercano al pueblo, los chopos y los enebros.
Antes de 1845 se llamaba tan sólo Castrillo, es decir, pequeño castillo; pero a partir de esta fecha se añadió el sufijo de Sepúlveda, por pertenecer a esta Comunidad de Villa y Tierra. Existieron en la zona los despoblados de Aldioces, Aldearrabal y Villabeses. Se trata de un lugar cargado de historia, pues en su término se han encontrado vestigios de un yacimiento neolítico y cerámica de la Edad de Hierro.
Es un edificio de grandes proporciones y con un curioso porche sobre columnas de piedra. En su interior conserva dos buenas tallas románicas que representan a la Virgen con el Niño y a San Bernabé.