A 12 km de al norte de Sepúlveda, entre Aldeonte y Navares de Enmedio, se encuentra Navares de Ayuso, un pequeño municipio segoviano ubicado en la vega del arroyo Navares, en su camino desde el macizo calizo hasta la campiña. Este pequeño municipio cuenta con 51 habitantes censados y, viviendo de forma continuada, unos 28 vecinos. Ubicado a unos 80 km de Segovia capital. Este municipio se desarrolla en torno a la calle principal que va ascendiendo suavemente por la loma de una vega.
Navares de Ayuso pertenece al Ochavo de Las Pedrizas y sus casas se distribuyen en torno a una sola calle que va subiendo hasta el ensanche en el que se encuentra la plaza, presidido por un crucero de piedra del siglo XVII.
En el siglo XIII, año 1247, la localidad era conocida como Nabares de Yuso, cuyo significado es “campo de nabos de abajo”.
Dentro de su término se encuentran unos cuantos despoblados como Casares, Castillejos, San Cristóbal de la Dehesa, San Juan de Navares y Valdeavellano, que junto a Navares de Ayuso, pertenecieron a la Comunidad de Villa y Tierra de Sepúlveda.
La ermita de la Virgen del Barrio es uno de los templos más antiguos de la comarca. En sus muros se puede observar un capitel visigodo reaprovechado. La planta consta de una sola nave rematada por cabecera cuadrangular y ha sido puesta en relación con la arquitectura prerrománica del siglo X.
Situada en el cerro que hay a las espaldas del pueblo, la Fuente de la Polaina de Navares de Ayuso era el lugar de donde se aprovisionaban de agua personas y ganado. La fuente tiene un gran caudal y su agua se distinguía por su buena calidad. El origen de su nombre es desconocido.
El edificio principal del pueblo se sitúa en la parte más baja de la población, casi en las afueras. Se trata de la iglesia parroquial de Nuestra Señora de las Dehesas, un edificio de origen románico tardío, construido sobre una planta de cruz latina. Tanto la nave como la cabecera están cubiertas por una bóveda de sillería con forma de cañón apuntado.
De la iglesia llama la atención su torre, situada sobre el centro del crucero. Dentro del porche de ingreso se puede contemplar su antigua puerta, también románica, decorada con arquivoltas lisas y soportadas por columnas con capiteles de piñas.
En el interior del templo podemos ver su retablo mayor, de factura barroca, dorado y organizado en tres calles. En la hornacina central se ubica la imagen gótica de la Virgen de las Dehesas, mientras que en las calles laterales aparecen San Miguel y San Sebastián. El centro del retablo, en su parte superior, lo ocupa un lienzo con una representación del Nacimiento. También forma parte del patrimonio sacro de esta iglesia una cruz procesional hecha en plata en el segundo tercio del siglo XVI.